miércoles, 11 de noviembre de 2009

que lloren los dragones

buscamos un pez y encontramos asesinos
vos mirabas los cobayos y demás absurdeces
licántropos recitaban poemas
pero la hora de bajar se aprontaba

la máquina tacataca que tacataquea
dijo mugriento alguien que era un saposaurio
yo me enluté en un ventanal antiguo
lleno de amorsupiales y de miraflores

durmiendo mariposas en tu espalda
contándoles cuentitos de las buenashadas
castillos de naipes sin quiero vale cuatro
llovía un sueño azul empapado en mielamores
y las putas oficinas estacadas esperándonos

no, vamos a decirles que no todas las veces
una y mil, axiomático, o doscientos sesenta
cuando nos hablen de la vida, esas reglitas de colores
cuando se encierren en candados de almacores malcogidas
y nos den sus caricias, lascivia quietud morada…
nuestra pasión vinotinto y el amor en nuestras manos
o como diría el diego, que la chupen bien chupada
amor es la posta… verdoliente abrazoario
y vos con tus acuarelas coloreándome los días

en fin, que te extraño, y juntos no nos para nadie
me cago de risa del mundo si vos te cagás de risa
trepebopos compartidos, dibujitos, arrogancia…
nunca fue tan importante y a la vez tan sinsentido
esta vida pataleante algo exigua y malquerida
que en tu abrazo es violeta, más abrazo, flor y espada
escuelas derruidas, disfraces y plazas pobladas.